Durante la jornada del jueves, en la Comisión de Legislación General del Senado bonaerense, se aprobó por unanimidad el proyecto de “Regulación del uso de artefactos de pirotecnia para uso recreativo”, presentado por el legislador Eduardo “Bali” Bucca. La iniciativa proteger a las personas que tienen hipersensibilidad acústica, que no pueden controlar lo que genera el ruido, como el dolor, que lo “sienten como electricidad”, y que, “en las personas con condiciones de espectro autista, a veces promueve la autolesión”.
“Este proyecto apunta a la empatía, pensemos en las personas que tienen hipersensibilidad acústica, estas personas no pueden controlar lo que genera el ruido: genera dolor, lo sienten como electricidad, es una cuestión sensorial que desencadena distintos tipos de comportamientos y en las personas con condiciones de espectro autista, a veces promueve la autolesión”, explicó el médico Bucca.
Se sumaron a la comisión asociaciones de toda la provincia de Buenos Aires, y participaron como oradores referentes del autismo como el psicólogo Matías Cadaveira, los niños influencers de 9 y 12 años, Ian Moche y Bruno Nicolini. Además, de forma virtual expusieron Alexia Rattazzi de PANAACEA, la Asociación de Padres TEA 3 de Febrero, Casa Abanico, CORIM Olavarría, Asociación Azul, TGD padres San Nicolás y APAdeA, como también niños con la Condición del Espectro Autista (CEA) y familiares que dieron sus testimonios.
Cabe destacar que el proyecto ya cuenta con el dictamen favorable de todas las comisiones, y solo resta su tratamiento en el recinto de la Cámara Alta bonaerense, para allí ser votado.
“Esta ley de pirotecnia cero está muy buena porque no solo beneficia a los autistas, sino también a los animales y la naturaleza. Pasito a pasito podemos intentar que no haya más pirotecnia”, manifestó en su discurso el joven activista Ian Moche (9 años).
El proyecto plantea la prohibición y uso de artículos de pirotecnia que dañen la salud y el ambiente, respetando de ese modo, el derecho a la salud y bienestar de las personas que sufren de hipersensibilidad sonora, como las personas dentro del espectro autista, adultos mayores y niños.
La estadística mundial dice que 1 de cada 58 niños es diagnosticado con CEA, y según lo expresado por sus familias, son los niños los que más sufren: se tapan los oídos, tienen crisis de llanto e incluso llegan a autolesionarse.
(InfoGEI)