El intendente Sujarchuk, acompañado por las máximas autoridades del Japón en la Argentina, el embajador Takahiro Nakamae y el cónsul Yoshikazu Furukawa, celebraron el 50º Aniversario del Jardín Japonés de Escobar, junto a quien es su creador, el ingeniero paisajista Yasuo Inomata, la Diputada Nacional Laura Russo Sujarchuk, el presidente de la Fiesta de la Flor, Tetsuya Hirose, y el secretario general de la Provincia de Buenos Aires, Fabián Perechodnik.
Se trató de un momento de mucha emoción y reflexión, que permitió valorar en toda su dimensión la influencia de la colectividad japonesa en el partido de Escobar, sobre todo a través de su cultura y sus tradiciones que hoy marcan a fuego nuestra identidad como Capital Nacional de la Flor.

Luego recorrieron las remodelaciones realizadas por la Municipalidad, un espacio zen y una casa característica de estilo nipón, con cerramiento de hierro y vidrio, que invita a la contemplación de la belleza del lugar, y plantaron un ejemplar de Gingko Biloba, un árbol que es venerado en Japón, como símbolo de fraternidad entre los pueblos.
En la oportunidad, el jefe comunal destacó la importancia de que cada escobarense visite en familia el Jardín Japonés, “…este espacio que nos pertenece desde lo más profundo de nuestra identidad y que nos distingue como ejemplo de una comunidad integradora y solidaria con quienes llegaron hace muchos años a nuestra tierra en busca de paz y prosperidad”, finalizó.